1
Leonor, esta vez con el pelo recogido y con Nevermore en su regazo, aguardaba pacientemente apoyada en el escritorio. El peinado exhibía desnudo su bello cuello de cisne, que inquietantemente imaginé morder cual fiera asfixiando a su presa.
_¿Y bien?
_Acepto la misión.
_Muy bien. ¡Quítenle las esposas! –Dirigiéndose a los guardias-.
_Le demando que no cuente a nadie por cual país optó. Se trata de una misión de altísima confidencialidad y se le informará en detalle en su debido momento. Su único confidente será el señor Palas. ¿Entendió?
_Sí, señora.
_Confiamos en usted. No nos decepcione. No estará libre dentro del edificio, pero sí en su área. Si se sospecha que intenta escapar, será exterminado.
_Sí, señora. Soy un hombre de palabra.
_Pueden retirarse.
Ya en el ascensor pude ver como Palas oprimía el número más15. Ese no era el piso donde estaba alojada mi celda.
_¿A dónde vamos?
_Nos dirigimos al ambiente dónde se encuentran los especímenes. Podrás seleccionar uno de ellos.
Al arribar, el olor no permitía imaginar algo diferente. Era aroma símil de hospital. Vapor de desinfectante y anestesia que pone los pelos de punta.
El piso más15 era notoriamente más grande de los que conocía hasta el momento. Como mínimo el doble del de mi celda (menos3) y varias veces más que el de la oficina de Leonor (menos7). Por su estructura circular y el tamaño de los pisos visitados, pude imaginar la vista externa del edificio como la de un inmenso y semienterrado cono invertido.
2
_¡Llegamos! –Dijo Palas orgulloso y excitado-
Boquiabierto, contemplé el ultramoderno laboratorio. Lo conformaban diferentes salas con divisiones transparentes, que en su conjunto dibujaban un indescifrable laberinto. En cada sala, en el centro y de a racimos de a cuatro, las matrices contenían humanos que eran pertinazmente vigilados y estudiados por diferentes grupos de científicos.
_Aquí se estudian los mutantes capturados.
_¿Aquí estaba yo?
_Así es. Aquí retomaste la conciencia.
Recorrimos por varios minutos más, yo expectante desde mi silla de ruedas y Palas empujando lentamente para que pudiera apreciar en toda su magnitud el proyecto del cual notoriamente se sentía orgulloso.
Al ver humanos en diferentes estados de mutación, pude terminar de comprender que los Hombres Morsa eran la etapa definitiva de una horrible mutación humana.
En determinado momento se detuvo y levantó su mano apuntando a un racimo de matrices. Pude apreciar en una a Rabito y en otra a Armando. Desplacé la silla de ruedas logrando apreciar las matrices que se encontraban ocultas tras las otras.
Carlitos ocupaba una y en la otra estaba….
_¡Palas! ¿Es esa mi pierna?
_Así es Mateo. Esa es la matriz que habitaste durante 22 años.
Era muy extraño verla ahí, solitaria; gigante. Al igual que sucede con una muela, mi pierna aparentaba ser más grande de lo que parecía en su ubicación primigenia.
Ya desvanecida la impresión, con la nariz pegada al vidrio contemplé a los inanimados ocupantes.
¿A quién debería elegir para esta suicida misión? Los recuerdos comenzaban a hervir en mi cabeza.
3 .Carlitos.
Debo admitir que soy de esos tipos que gritan de todo desde la tribuna. Le grito al juez y a los contrarios, pero por sobre todo, me ensaño con las malas jugadas de los pataduras de mi cuadro. He berreado todo tipo de improperios pero son dos mis preferidos: “rústico” y “tronco”. Rústico se los vomito a quienes demuestran ser poco ágiles en el dominio del balón; tronco directamente es para los que parecen tener palos por piernas.
También debo admitir que era de esos insoportables que cuando jugaba un picado, corría por toda la cancha y puteaba durante todo el partido, aunque mis intervenciones eran casi siempre poco felices. Tal vez los pibes del barrio que conformaban el equipo solo me soportaban porque mi padre era el único que los llevaba al parque a jugar picados. Estos picados duraban horas y a veces jugábamos tres o cuatro.
El parque al que me refiero es muy arbolado. Unos se utilizaban para conformar los arcos tirando como segundo palo alguna ropa y los que quedaban entremedio, como los jueces de un encuentro oficial, formaban parte del partido. En alguna ocasión había que eludirlos y si te daba un rapto de habilidad, podías llegar a tirar alguna pared de árbol.
En el parque tuvimos una época de gloria donde pocos se atrevían a enfrentarnos. Los que conformaban el poderoso team de la esquina eran: Carlitos, Juanjo, Alejandro, el Enano, Fabián, Lalo, mi viejo y yo. Carlitos no era dotado para ser un jugador de campo, por lo cual se fue especializando obligadamente para ser el portero del equipo. Una excelente actuación sucedía a una desastrosa, pero con el tiempo fue mejorando.
La cuestión es que nos encontrábamos en uno de esos partidos de campito. En esa época teníamos un excelente nivel y goleábamos a quien se nos pusiera adelante. Las víctimas de ese día, no sabían como pararnos y eran aplastados 6 a 0. Todos queríamos ganar 10 a 0. La gracia ya no era ganar el partido, sino ser el goleador. Estábamos tan mal acostumbrados a ganar siempre, que existía una competencia interna por ser el goleador del día. Claro está, yo ni picaba porque solo hice un gol en mi vida.
En un momento, un ataque del desesperado y humillado equipo contrario culminó con una atajada de antología de Carlitos. La atrapó en el ángulo. Todos aplaudimos y él orgullosamente picó un par de veces la pelota (ya que detrás del arco, estaba su gran amor: mi prima), y se dispuso a sacar el fulminante contragolpe.
Todos corrimos y pedimos la pelota. Sería un contragolpe mortal. Carlitos dio un fuerte saque de mano con tanta mala suerte que la pelota pegó en el pequeño tronco de un arbolito que estaba a unos diez metros. La pelota tomó una velocidad inusitada y se clavó en el ángulo derecho del atónito arquero.
Para que se visualice como fué, Maradona le convirtió un gol igual a los griegos en un Mundial, solo que este fue a más velocidad y que el árbol no se lo gritó a la cámara. El árbol no festejó, pero sí los integrantes del equipo contrario, que lo abrazaban y exclamaban hurras. ¡Increíble! Estábamos “gustando y goleando” y todo se vino abajo por un pequeño arbusto que estaba siendo vitoreado como si de un héroe se tratara.
Fue un golazo tan espectacular que ninguno se animó a invalidarlo, ya que era digno de aparecer en las recopilaciones de los mejores de todos los tiempos, y que además, el otro equipo ya lo había festejado. Para peor el partido lo ganamos 10 a 1. Sí, lo ganamos 10 a 1, pero el árbol fue nuestro verdugo. Ya no importaba quién fue el ganador. Ya no importaba quién fue el goleador. El arbolito se había llevado todos los lauros.
Mucho tiempo después al pasar por el parque y verlo, sentía un profundo respeto. Él, impávido, en el mismo lugar, con la frialdad y entereza de un grande del fútbol.
Como decía al principio, me gustaba gritar en la cancha pero nunca más le grité tronco a un jugador. Nunca más, desde aquel día hace ya mucho tiempo, en que un humilde arbolito fue el jugador del partido.
4 .Rabito.
Rabito llegó a ser mi mascota de pura casualidad. Mis padres nunca habrían dejado tener un perro por mascota, pero para ese entonces mamá había muerto y papá estaba en la cárcel por homicidio culposo. La jueza lo había sentenciado por estar altamente alcoholizado en el accidente en que falleció mi madre.
Por suerte mi abuela se hizo cargo de nosotros. Una mascota puede ser un bálsamo para los dolores de espíritu y la abuela lo sabía, por ello no se opuso a la adopción de esa bola peluda que apareció en su jardín.
Lo criamos con todo el cariño que se le puede dar a una mascota; lamentablemente el can provenía fallado de fábrica. Un perro totalmente loco. Cuando intentábamos acostumbrarlo a estar en la casa, lo primero que hacía era orinar el sillón de la abuela.
Si querías darle un pequeño bocado de tu comida, el perro te arrancaba un dedo. Si le pegabas con un diario para aleccionarlo, Rabito te corría a tarascones por todo el patio.
En definitiva al perro no lo echamos porque le temíamos. Era el que mandaba en la casa. Sin duda él se creía el macho alfa, ya que se prendía de la pierna de cualquiera sin ningún miramiento.
En cierta oportunidad que con Analía (mi hermana), lo llevamos a una plaza, Rabito se mandó la peor macana de todas.
Jugando con una pelota estaban un orgulloso padre y su hijo de 2 años. En determinado momento el incauto niño se agachó y abrazó la enorme pelota. Para nuestro horror, Rabito a la carrera lo montó cual conejo en temporada de apareamiento. Recuerdo ver la cara de sorpresa con que el niño recibió la embestida estilo salto del tigre y la expresión horrorizada del padre. Con Analía sin mediar palabra y al unísono, huimos silbando bajito.
Varias cuadras después apareció el perro intacto. Nunca supimos si el tipo le pegó una patada y si el niño años más tarde desarrolló una adictiva manía de ser montado por un burro.
Con mi hermana diferíamos en muchos temas, pero en lo que respecta a Rabito coincidíamos plenamente: ¡¡Qué perro de mierda!!
5 .Armando.
Respecto a Armando, mi verdadero padre, no tengo nada para contar. Apenas lo conozco y ustedes a través de mi relato saben de él lo mismo que yo. Lo único que puedo pensar al verlo inmóvil en la matriz, es que nos falta la misma pierna y eso no es un parecido del que un hijo pueda sentirse orgulloso.
Sí tengo recuerdos de Rubén, mi padre adoptivo. A pesar de no ser ejemplar, hizo todo lo posible por sacarme buena gente. Era un gordo bonachón y borrachín, que contaba chistes en todas las reuniones, pero luego de la muerte de Sonia (mi madre adoptiva), ya no fué el mismo.
Nunca pidió la excarcelación por buena conducta, ya que se sentía atrozmente culpable y esgrimía que merecía una pena mayor. De todas maneras, cualquier castigo que se le impusiera no podría igualar el dolor de ver morir por culpa propia a su mujer.
Los peritos concluyeron que el accidente se produjo por el alto estado etílico del conductor, pero nunca se percataron de que la verdadera razón fue la pérdida de la rueda delantera derecha.
Calculé que saldría un par de días después, mientras el realizaba uno de sus solitarios viajes de negocios. La vida de uno puede cambiar por la simple diferencia de media vuelta de tuerca.
7
Tal vez sería mejor si los dejo descansar en paz. Por otra parte una cara familiar en esta época desconocida, alguien en quien confiar, aumentarían las posibilidades de supervivencia.
La pregunta está sobre la mesa.
¿Debería acompañarme alguno en esta peligrosa misión?
Leonor, esta vez con el pelo recogido y con Nevermore en su regazo, aguardaba pacientemente apoyada en el escritorio. El peinado exhibía desnudo su bello cuello de cisne, que inquietantemente imaginé morder cual fiera asfixiando a su presa.
_¿Y bien?
_Acepto la misión.
_Muy bien. ¡Quítenle las esposas! –Dirigiéndose a los guardias-.
_Le demando que no cuente a nadie por cual país optó. Se trata de una misión de altísima confidencialidad y se le informará en detalle en su debido momento. Su único confidente será el señor Palas. ¿Entendió?
_Sí, señora.
_Confiamos en usted. No nos decepcione. No estará libre dentro del edificio, pero sí en su área. Si se sospecha que intenta escapar, será exterminado.
_Sí, señora. Soy un hombre de palabra.
_Pueden retirarse.
Ya en el ascensor pude ver como Palas oprimía el número más15. Ese no era el piso donde estaba alojada mi celda.
_¿A dónde vamos?
_Nos dirigimos al ambiente dónde se encuentran los especímenes. Podrás seleccionar uno de ellos.
Al arribar, el olor no permitía imaginar algo diferente. Era aroma símil de hospital. Vapor de desinfectante y anestesia que pone los pelos de punta.
El piso más15 era notoriamente más grande de los que conocía hasta el momento. Como mínimo el doble del de mi celda (menos3) y varias veces más que el de la oficina de Leonor (menos7). Por su estructura circular y el tamaño de los pisos visitados, pude imaginar la vista externa del edificio como la de un inmenso y semienterrado cono invertido.
2
_¡Llegamos! –Dijo Palas orgulloso y excitado-
Boquiabierto, contemplé el ultramoderno laboratorio. Lo conformaban diferentes salas con divisiones transparentes, que en su conjunto dibujaban un indescifrable laberinto. En cada sala, en el centro y de a racimos de a cuatro, las matrices contenían humanos que eran pertinazmente vigilados y estudiados por diferentes grupos de científicos.
_Aquí se estudian los mutantes capturados.
_¿Aquí estaba yo?
_Así es. Aquí retomaste la conciencia.
Recorrimos por varios minutos más, yo expectante desde mi silla de ruedas y Palas empujando lentamente para que pudiera apreciar en toda su magnitud el proyecto del cual notoriamente se sentía orgulloso.
Al ver humanos en diferentes estados de mutación, pude terminar de comprender que los Hombres Morsa eran la etapa definitiva de una horrible mutación humana.
En determinado momento se detuvo y levantó su mano apuntando a un racimo de matrices. Pude apreciar en una a Rabito y en otra a Armando. Desplacé la silla de ruedas logrando apreciar las matrices que se encontraban ocultas tras las otras.
Carlitos ocupaba una y en la otra estaba….
_¡Palas! ¿Es esa mi pierna?
_Así es Mateo. Esa es la matriz que habitaste durante 22 años.
Era muy extraño verla ahí, solitaria; gigante. Al igual que sucede con una muela, mi pierna aparentaba ser más grande de lo que parecía en su ubicación primigenia.
Ya desvanecida la impresión, con la nariz pegada al vidrio contemplé a los inanimados ocupantes.
¿A quién debería elegir para esta suicida misión? Los recuerdos comenzaban a hervir en mi cabeza.
3 .Carlitos.
Debo admitir que soy de esos tipos que gritan de todo desde la tribuna. Le grito al juez y a los contrarios, pero por sobre todo, me ensaño con las malas jugadas de los pataduras de mi cuadro. He berreado todo tipo de improperios pero son dos mis preferidos: “rústico” y “tronco”. Rústico se los vomito a quienes demuestran ser poco ágiles en el dominio del balón; tronco directamente es para los que parecen tener palos por piernas.
También debo admitir que era de esos insoportables que cuando jugaba un picado, corría por toda la cancha y puteaba durante todo el partido, aunque mis intervenciones eran casi siempre poco felices. Tal vez los pibes del barrio que conformaban el equipo solo me soportaban porque mi padre era el único que los llevaba al parque a jugar picados. Estos picados duraban horas y a veces jugábamos tres o cuatro.
El parque al que me refiero es muy arbolado. Unos se utilizaban para conformar los arcos tirando como segundo palo alguna ropa y los que quedaban entremedio, como los jueces de un encuentro oficial, formaban parte del partido. En alguna ocasión había que eludirlos y si te daba un rapto de habilidad, podías llegar a tirar alguna pared de árbol.
En el parque tuvimos una época de gloria donde pocos se atrevían a enfrentarnos. Los que conformaban el poderoso team de la esquina eran: Carlitos, Juanjo, Alejandro, el Enano, Fabián, Lalo, mi viejo y yo. Carlitos no era dotado para ser un jugador de campo, por lo cual se fue especializando obligadamente para ser el portero del equipo. Una excelente actuación sucedía a una desastrosa, pero con el tiempo fue mejorando.
La cuestión es que nos encontrábamos en uno de esos partidos de campito. En esa época teníamos un excelente nivel y goleábamos a quien se nos pusiera adelante. Las víctimas de ese día, no sabían como pararnos y eran aplastados 6 a 0. Todos queríamos ganar 10 a 0. La gracia ya no era ganar el partido, sino ser el goleador. Estábamos tan mal acostumbrados a ganar siempre, que existía una competencia interna por ser el goleador del día. Claro está, yo ni picaba porque solo hice un gol en mi vida.
En un momento, un ataque del desesperado y humillado equipo contrario culminó con una atajada de antología de Carlitos. La atrapó en el ángulo. Todos aplaudimos y él orgullosamente picó un par de veces la pelota (ya que detrás del arco, estaba su gran amor: mi prima), y se dispuso a sacar el fulminante contragolpe.
Todos corrimos y pedimos la pelota. Sería un contragolpe mortal. Carlitos dio un fuerte saque de mano con tanta mala suerte que la pelota pegó en el pequeño tronco de un arbolito que estaba a unos diez metros. La pelota tomó una velocidad inusitada y se clavó en el ángulo derecho del atónito arquero.
Para que se visualice como fué, Maradona le convirtió un gol igual a los griegos en un Mundial, solo que este fue a más velocidad y que el árbol no se lo gritó a la cámara. El árbol no festejó, pero sí los integrantes del equipo contrario, que lo abrazaban y exclamaban hurras. ¡Increíble! Estábamos “gustando y goleando” y todo se vino abajo por un pequeño arbusto que estaba siendo vitoreado como si de un héroe se tratara.
Fue un golazo tan espectacular que ninguno se animó a invalidarlo, ya que era digno de aparecer en las recopilaciones de los mejores de todos los tiempos, y que además, el otro equipo ya lo había festejado. Para peor el partido lo ganamos 10 a 1. Sí, lo ganamos 10 a 1, pero el árbol fue nuestro verdugo. Ya no importaba quién fue el ganador. Ya no importaba quién fue el goleador. El arbolito se había llevado todos los lauros.
Mucho tiempo después al pasar por el parque y verlo, sentía un profundo respeto. Él, impávido, en el mismo lugar, con la frialdad y entereza de un grande del fútbol.
Como decía al principio, me gustaba gritar en la cancha pero nunca más le grité tronco a un jugador. Nunca más, desde aquel día hace ya mucho tiempo, en que un humilde arbolito fue el jugador del partido.
4 .Rabito.
Rabito llegó a ser mi mascota de pura casualidad. Mis padres nunca habrían dejado tener un perro por mascota, pero para ese entonces mamá había muerto y papá estaba en la cárcel por homicidio culposo. La jueza lo había sentenciado por estar altamente alcoholizado en el accidente en que falleció mi madre.
Por suerte mi abuela se hizo cargo de nosotros. Una mascota puede ser un bálsamo para los dolores de espíritu y la abuela lo sabía, por ello no se opuso a la adopción de esa bola peluda que apareció en su jardín.
Lo criamos con todo el cariño que se le puede dar a una mascota; lamentablemente el can provenía fallado de fábrica. Un perro totalmente loco. Cuando intentábamos acostumbrarlo a estar en la casa, lo primero que hacía era orinar el sillón de la abuela.
Si querías darle un pequeño bocado de tu comida, el perro te arrancaba un dedo. Si le pegabas con un diario para aleccionarlo, Rabito te corría a tarascones por todo el patio.
En definitiva al perro no lo echamos porque le temíamos. Era el que mandaba en la casa. Sin duda él se creía el macho alfa, ya que se prendía de la pierna de cualquiera sin ningún miramiento.
En cierta oportunidad que con Analía (mi hermana), lo llevamos a una plaza, Rabito se mandó la peor macana de todas.
Jugando con una pelota estaban un orgulloso padre y su hijo de 2 años. En determinado momento el incauto niño se agachó y abrazó la enorme pelota. Para nuestro horror, Rabito a la carrera lo montó cual conejo en temporada de apareamiento. Recuerdo ver la cara de sorpresa con que el niño recibió la embestida estilo salto del tigre y la expresión horrorizada del padre. Con Analía sin mediar palabra y al unísono, huimos silbando bajito.
Varias cuadras después apareció el perro intacto. Nunca supimos si el tipo le pegó una patada y si el niño años más tarde desarrolló una adictiva manía de ser montado por un burro.
Con mi hermana diferíamos en muchos temas, pero en lo que respecta a Rabito coincidíamos plenamente: ¡¡Qué perro de mierda!!
5 .Armando.
Respecto a Armando, mi verdadero padre, no tengo nada para contar. Apenas lo conozco y ustedes a través de mi relato saben de él lo mismo que yo. Lo único que puedo pensar al verlo inmóvil en la matriz, es que nos falta la misma pierna y eso no es un parecido del que un hijo pueda sentirse orgulloso.
Sí tengo recuerdos de Rubén, mi padre adoptivo. A pesar de no ser ejemplar, hizo todo lo posible por sacarme buena gente. Era un gordo bonachón y borrachín, que contaba chistes en todas las reuniones, pero luego de la muerte de Sonia (mi madre adoptiva), ya no fué el mismo.
Nunca pidió la excarcelación por buena conducta, ya que se sentía atrozmente culpable y esgrimía que merecía una pena mayor. De todas maneras, cualquier castigo que se le impusiera no podría igualar el dolor de ver morir por culpa propia a su mujer.
Los peritos concluyeron que el accidente se produjo por el alto estado etílico del conductor, pero nunca se percataron de que la verdadera razón fue la pérdida de la rueda delantera derecha.
Calculé que saldría un par de días después, mientras el realizaba uno de sus solitarios viajes de negocios. La vida de uno puede cambiar por la simple diferencia de media vuelta de tuerca.
7
Tal vez sería mejor si los dejo descansar en paz. Por otra parte una cara familiar en esta época desconocida, alguien en quien confiar, aumentarían las posibilidades de supervivencia.
La pregunta está sobre la mesa.
¿Debería acompañarme alguno en esta peligrosa misión?
22 comentarios:
Buen capítulo, no de los mejores pero se deja deglutir...impecable la parte de Rabito y sus andanzas en la plaza, todo un aprovechador de oprtunidades ja jaa...
Esta muy bien la idea por el momento, creo que la persona que tiene que ir es tu padre verdadero, dado que tiene alguna experiencia de combate y por su edad te va a moderar cuanto de pongas loco de coraje. Además le harias un bien a el tambien tendrían que ponerle una pierna nueva y dado la tecnologia de las mismas te daría una capacidad de fuego mayor combinando distinto armamento.
Jorge:
Me has convencido. He cambiado mi voto de Rabito a Armando. Me gustaria ver esa combinacion de habiles piernas, como la delantera Garrincha-Pele.
Jajajaja!!! Muy bueno el capítulo!!! Qué anécdotas!!!!
La de Carlitos es para pegarse un tiro en las bolas!!!! y la de Rabito muy fuerte!!!! me imagino la situación!!! jajajaa
Estaría muy divertido que se fuera a garchar al futuro difunto presidente, jajaa!!!! aunque la idea de Jorge es buena, es una buena oportunidad de recuperar el tiempo perdido con tu viejo también.
Inevitablemente mi mente pervertida me dice que la historia va a ser mucho más divertida si te acompaña Rabito. ñmuaj jua jua.
Mediocre capítulo para mi gusto ("nivel menos diez")Ojalá haya media vuelta de tuerca,y no se cumpla eso que segundas partes nunca fueron buenas.Incluso ha decaído mucho la sección comentarios; en la primera parte,se abrió un espacio amplio para el debate, que en la actualidad no percibo. Me gustaría, ya que el autor atravieza las barreras del espacio tiempo, incorpore a Nábolix como compañera de Mateo, formando el duo futurista "Laca-Gamos"; serían imponentes!
Bobera: Gran comentario. Gracias por participar.
Bobera, menos mal que en este blog la libertad de expresión aún existe y el transitar de los ciudadanos del mundo, así sea por el ciberespacio, es libre y sin "piquetes", sin interéses politico-económico-partidario, no como el ejemplo lamentable que dan sus compatriotas en las cabezeras de los puentes que unen los uruguayos con ustedes los argentinos. Creo que el debate que usted dice no es el debate justamente de la historia sino el debate que genera rivalidades y enfrentamiento sobre la "bendita-maldita" empresa de pasta de celulosa de capitales europeos. A propósito Bobera, le agradecería que ni se moleste en contestarme, ya que según usted, mi "integilencia" es inferior a la suya, sin embargo aportes constructivos y positivos de los demás participantes serán bienvenidos.
Estamos enfrentándonos con hombres-morsa botniáticos. Necesitamos un aliado capaz de pensar como ellos, un verdadero animal.
Mi voto va a Rabito, heredero de Lassie y de Comisario Rex.
Jajaja!!! Comisario Rex! qué de más!!! jajaja
Yo creo que como dijo El Vengador del Futuro, los debates se generaban entorno a si la pastera contaminaba o no y ahi surgían puteadas entre argentinos y uruguayos acusando al blogger de ser de una u otra nacionalidad.
Pero al tener una Introducción donde queda claro que esto no es un blog proselitista a favor o encontra de la Planta, la gente ya no putea al blogger innecesariamente.
El insultar a alguien por lo que piensa es que el que insulta no piensa. Sin importar que causa defiende. La verdad que el perro lo va a poner en complicaciones, por su caracter. Sigo pensando que armando es el mas correcto, pero no voy a votar de nuevo porque no seria etico.
Estimado Pedro: agradezco los elogios(no esperaba menos de ti)así como también, tus palabras de aliento para seguir participando en el blog(tu fascismo "a la uruguaya" me resulta por demás simpático)Debo felicitarte por el "Bobera",ya que denota una creatividad (en pila!),que viniendo de parte de un oficinista (eres bancario o estatal?)constituye un mérito impresionante.
Respecto al discurso "te raja" de "el vengador del pasado" (podría llamarse "del futuro",siendo uruguayo?),lo resumo de manera simple en dos palabras:"papo furado"
Bobera me hizo caso y eso que le solicité antes, se nota que usted lee muy rápidamente o no presta atención. Conociendo a varios argentinos, usted no les llegas ni a los talones; denotando además una terrible enfermedad de nacimiento: la de ser un porteño baboso y repugnante, creyéndose omnipotente e intocable lleno de modismos piqueteros y de confrontación. Lo que a la vista está, no necesita anteojos...y todo lo que le digo, lo veo si desde el futuro...por que desde acá visualizo su patético fin.
Estimado "el vengador del pasado",debo decirte que te encuentras algo nervioso, y producto de eso, tu post resulta confuso, contradictorio y plagado de falacias,llegando por momentos al borde de lo ininteligible. Como tu sabes, está lejos de mí, debatir contigo, no obstante ello, soy una persona sensible,y dado el particular aprecio que te tengo, sugiero, reescribas el mismo prolijamente, y en un español que se pueda comprender; si es necesario,puedes recurrir a tu profesora en el liceo; con gusto te dará una mano.Debo confesarte,que yo también me encuentro algo nervioso en esta tarde de miercoles, de cara al mar; mi vista se pierde hacia el roquedal de Punta Palomar, y en los destellos de su faro; pienso y pienso (en mi voto),centrándome en la historia, y no logro elegir al acompañante de Mateo en su disparatada misión (es lógico que en soledad, no podrá realizarla; sobran los motivos)Al duo con Nábolix (hubiera sido desopilante!), lo doy por perdido(un desperfecto técnico en Antel, una operadora mateando, o tal vez factores climáticos , seguramente, impedidieron el contacto con Mateo)
Se me presentan dos líneas de pensamiento, la uruguaya y la argentina. Si opto por la primera (pensaría como un animal?),votaría por rabito(un perro astuto;será un cimarrón?) ; si voy por la segunda,consideraría algunas cuestiones; el can se encuentra inmune? el contagio mutante, lo podría convertir en tal? (de mejor amigo,pasaría a peor enemigo) Algún humano de la matrix, podría recibir una transfusión sanguínea por parte de Mateo?(sería un tanto catastrófico para el receptor, pero si de salvar al mundo se trata...)Realizada la misma, obtendría inmunidad?
Que dilema por Dios! No tengo claro, que pensamiento seguir
RABITO!!!! ATAQUE !!!
Jajajaaa!!!!! "una operadora mateando"!!!!!!!!! Parece que estuviste por Uruguay!!! Me pasé toda la mañana tratando de comunicarme con la Intendencia y no me atiende nadie!!!!!!!!!!! Y eso pasa con todo organismo público (Antel, UTE, Intendencias o cualquier dependencia Estatal)
Seguro estan mateando como dice Dodera mientras se comentan el capítulo pasado de "La Lola" o alguna telenovela de esas, mientras el telefono suena interminablemente frente a una cola de clientes que empiezan a perder la paciencia...
Como la empleada pública de Gasalla!!! se ve que allá es mas o menos lo mismo...
Bobera el que está nervioso es usted a pesar de estar frente al océano y cerca del antártico(será??); perturbado por no querer reconocer su origen(o será provinciano que emigró a la capital??) y si soy tan ininteligible para su "integilencia" como es que aún así me responde?. No me merezco vuestro aprecio, dada su erudita agudeza intelectual, de la cual seguramente yo ni en la escuela pensaba tener. Por favor absténgase de decir más boberías baratas y permítanos seguir opinando sobre el blog que es lo que más me interesa a mí, a pesar de no haber ido al liceo y no tener una mano que ma auxilie a escribir en español que solo usted entienda.
Estimado amigo "el vengador del pasado": por lo visto tu prosa ha mejorado a pasos agigantados, pero noto ciertas fallas en lo referido a comprensión de textos, y lo que es mas alarmante, a geografía de nuestro amado Uruguay. En algún momento negué que estaba nervioso? Muy por el contrario; estamos a jueves, y todavía no decidí mi voto. En algún momento, te impedí opinar sobre el blog? (ese, "permítanos seguir opinando", acaso habla de que tienes otro "yo"?); de ninguna manera! Considero,humildemente, que toda opinión es sumamente valiosa (y mas la tuya,je)
Respecto a tus referencias sobre el "oceano ,cerca del antartico", debo decirte, que Punta Palomar, se encuentra en las proximidades de Punta del Diablo(ROU)Tiene un pequeño faro,por supuesto, no tan imponente como los que se encuentran en Cabo Polonio,La Paloma,Jose Ignacio o Isla de Lobos.
Voviendo un poco al tema que nos atañe, las dos líneas de pensamiento (uruguaya y argentina), me siguen atormentado.Siguiendo la primera, Rabito es número puesto (pensar como un animal ,es fácil); pero me si de pronto me doy vuelta como un panqueque (cual Batlle frente a Duhalde)optaría por Armando y su pierna nueva; y es claro, "la delantera con Mateo,nosh clashificaría paral mundial,vo!"
Pero si siguiera la argentina,tal vez se me ocurriría que la única experiencia en combate de Armando, fue un "China ataca Kamchatka", en un juego de TEG, años atrás,o que su destreza en el manejo de armas blancas,fueron el as o el siete de espadas, en interminables partidas de truco. Pienso en Carlitos; viejo corsario del Rio Uruguay; conocerá el rio Yaguarí,la boca falsa del rio Negro, las playas de la Concordia,el banco de los pájaros, el arroyo Catalan,tan siquiera Punta Chaparro?
Sigo pensando (mientras escucho las olas que se agitan distantes) Descorcho un tannat del bueno (espero, me brinde sabiduría)
Estimado Williman Dodera: Yo soy un amante del humor sarcástico e irónico. Desgraciadamente debo informarle que manejar este tipo de humor debe ser tarea por demás delicada y cuidadosa. A mi humilde entender usted ha pasado el límite del humor irónico para pasar a la falta de respeto (quiero creer de corazón, que no fue una acción maquiavélica sino todo lo contrario)
Yo leo este blog, desde el punto de vista literario, lúdico y ,por que no,curioso. No lo miro desde los conceptos de: Uruguay vs. Argentina, Gualeguaychu vs. Fray Bentos, Botnia vs. GreenPeace, ni nada parecido; entonces creo que el cruce de improperios entre uruguayos y argentinos no tiene lugar en este sitio. Quizas (es mi deseo) usted reflexione sobre esto y siga exponiendo sus valiosas opiniones (como las de todos los que postean aqui) sin recurrir a comentarios que puedan causar heridas (graves o no) en los que aquí se reunen para disfrutar de estas lecturas
SR. DODERA.
Para que sepa en URUGUAY(Se han eliminado las Operadoras) Todos los discados son directos agregando los codigos y subfijos correspondientes, posiblemente se puede haber equivocado al discar. Salvo que el micropocesador de la Central automatica estuviera estuviera charlando con la nueva memoria ram o discutiendo con otro micro si el humano existia o no porque uno de ellos era ateo.
Estimados!!!!!!!!!!!
Qué pasó acá???
Me fui una semanita y me encuentro con terrible kilom... Al final terminaron haciendo lo que no querían hacer, convirtiendo esto en una discvusión entre Uruguayos y Argentinos (gente pensé que por lo menos en este foro lo habíamos superado), y que tienen en contra de tomar mate en el laburo???? Ahí sí los peleo, no me relajen el mate.
Para mi los capítulos siguen tan bueno como antes, además tienen ese cierto seguimiento con la saga más grande de todos los tiempos (dejate de que Harry Potter) RESIDENT EVIL!!!!!
Sr. William Dodera, mi intención no es faltarle el respecto y soy partidaria de la libertad de expresión, pero la gente como Ud. que llega a un lugar criticando y armando revuelta no me cae en gracias, nunca había visto un comentario suyo por aquí y ahora de pronto aparece para pelear.
A propósito quién es Nábolix????? Veo que tenés un serío problema conmigo del cuál me acabo de dar cuenta porque se me ocurrió revisar los comentarios anteriores para ver de dónde venía eso de Nábolix... y te aviso que tendría que ser Nábalix je je, más respeto con la señorita la próxima che.
Bien, es lo único que me voy a molestar en decirle.
Lamentablemente Mateo, tenés presente en tu foro gente que tiene metida en la cabeza esa idea de la guerra Uruguay - Argentina. Una verdadera lástima ya que es un forro en el que sabíamos que estabamos presentes ambos países y sin embargo nos tomábamos bien las bromas, sin insultos y con buan onda.
Te mando un abrazo y al resto de los compañeros foristas y espero tu próximo capítulo encaminandote hacia la travesía junto a Rabito, el cuál pienso estará hoy o mañana.
AVANTI!!!!
Mil disculpas por algunos errores dactilográficos que cometí, algunos suenan muy feo y sucedieron sin la menor intención... (me faltó una S por ahí y me sobró una R, etc.) es que el mate no me permite escribir muy bien esta mañana...
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